(NdG) – Lo que analistas políticos especialistas en Corea del Norte habían predicho es ahora realidad, King Jong-Un hijo del fallecido líder Kim Jong-Il es ahora la nueva cabeza del país asiático. Pero cual es su relación con Suiza? Simple, el joven dirigente pasó varios años de incógnito estudiando en Berna.

A principios de este año en asignación para Al Jazeera London investigué la conexión y trabajé en la entrevista de Marcos Imhoff, un joven compañero de escuela del ahora líder coreano.

Imhoff, lo describió como un «buen amigo que adoraba el baloncesto y las estrellas del balón estadounidenses».

La investigación que llevé a cabo como parte de esa asignación, demostraba que el joven Un como se le conocía en Berna, vivía en un apartamento cerca a la zona de prestigiosas embajadas en la ciudad.

Allí tenía varios «sirvientes» y utilizo ésa palabra porque de acuerdo a Imhoff, aquellos le «servían como a una persona de alto rango, con un alto grado de respeto y sin ninguna familiaridad» y no eran meramente empleados a su cargo.

«En una ocasión que nos sirvieron spaghettis que estaban un poco fríos, Un botó el tenedor del plato con tal agresividad que me sorprendí» dijo Imhoff. «Fue un cambio brusco porque anteriormente jamás demostró tener tal comportamiento. Los sirvientes nos presentaron tal tipo de reverencias que me sorprendí» dijo.

Pauline Plagnat, catedrática de la Universidad de Ginebra y experta en asuntos coreanos, dijo al periódico Le Figaro, que de acuerdo a las reglas del Confusionismo con el que lideraba Jong-Il, el gobierno coreano debía crear un nuevo culto en torno a la personalidad del joven para que éste asciendera al poder con el apoyo absoluto de las fuerzas militares y de los gobernantes. Algo que Jong-Il hizo antes de morir.

Otros reportes de prensa aseguran que Suiza conoce bien que la dinastía de Jong-Il se pasea por el país con frecuencia: “La misión diplomática norcoreana lista 10 diplomáticos, entre ellos: Koh Young-Hee, la tercera esposa del líder coreano y madre del joven Jong-Un. Ella, dice el periodista en cuestión, se lista bajo el seudónimo de “Chong Il-Son” y visita Suiza a menudo, incluso ha residido en una mansión en el área de Configny, en Ginebra y ha recibido tratamientos médicos en el cantón. Configny, vale la pena mencionar, es la ciudad más cara del cantón de Ginebra.

Analistas de la CIA estiman que el líder norcoreano tiene por lo menos unos 4 mil millones de dólares en cuentas secretas en Suiza.

Imhoff, y otros compañeros de escuela a quienes contacté en esa oportunidad, dijeron que un séquito le acompañaba en todas ocasiones pero le seguían de lejos. «Si llovía se mojaban, si nevaba se morían del frío pero Un jamás les hablaba».

Reportes de prensa de la RSR aseguran que el entonces líder coreano, Kim Jong-Il había enviado a su mejor diplomático, Ri Tcheul, para que estuviese en Suiza, uno de los países del oeste con los que aún existen relaciones bilaterales de comercio. Analistas aseguran que ésto indica que el embajador era también importante en el cuidado del joven Un a quien él mismo enseñaba diplomacia.

El embajador dejó su puesto en Suiza sólo meses después de que el joven Un abandonó sus estudios en Berna, en donde al parecer, también acudió su hermano mayor. El periodista suizo Ron Hochuli del periódico Le Temps dice que Jong-Un, sus hermanos y medios hermanos, asistieron a escuelas internacionales y públicas en Berna y Ginebra bajo nombres falsos.

Información previa aquí.

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